Se encuentra junto al puerto pesquero y deportivo de la Colònia de Sant Jordi. Su arena es blanca y fina. Su fondo marino, con una profundidad de aproximadamente tres metros a 200 metros de la orilla, es arenoso. El acceso es fácil, caminando unos 250 metros desde el aparcamiento más cercano. A unos 300 metros se puede divisar, entre otros, el islote de na Guardis, que conserva restos púnicoebusitanos.
No hay cartas de navegación para Ribadeo, pero merece la pena visitar en barca sus atractivos paisajes y los 5 m de canal de la ría Eo hacia el centro de la ciudad.