El flamenco es un arte genuinamente español. Sentir de cerca la pasión y la energía que transmite este espectáculo resulta una experiencia extraordinaria. Le invitamos a disfrutar de un tablao y entre en contacto con este arte considerado como universal, y que está enraizado con lo más profundo del sentimiento de España.
La Mallorquina es una parada obligada si eres amante de los buenos dulces. Inagurada en el siglo XVIII cuenta con un amplio abanico de delicatessen. El nombre del establecimiento proviene del origen balear del fundador: Juan Ripoll. Allí puso una tienda de pasteles principalmente ensaimadas con un salón interior para que los contertulios tomaran chocolate, café, cerveza, etc. Las ensaimadas mallorquinas fueron muy populares en aquella época, tomadas con chocolate.